El árbol de Diana

viernes, abril 28, 2006

¿Y tú qué eres?

Siento curiosidad por saber qué número debéis ser vosotros, los que rondáis por este blog. Si tenéis un poquito de tiempo hacer este test. Yo primero hice uno que me pasaron pero luego hice este por Internet a ver si daba lo mismo, y completamente: con mucha diferencia con los demás soy el número 7. Así que si lo queréis hacer acierta bastante. Luego no explica muy bien los números, yo tengo documentos que los explican mejor, pero bueno, los podéis bajar por el emule y tal.

La cosa es que ayuda ver tu tipo de personalidad predominante así desde fuera, en serio. Hacedlo, va, a ver cuál sois. Y ya está, ya no me pongo más pesada con esto, lo prometo.

http://www.personarte.com/test.htm

miércoles, abril 26, 2006

Tarde de miércoles

Está bastante extraño todo en el trabajo. Debe ser la primavera que nos pone sensibles, pensativos, risueños y juguetones. La gente no tiene ganas de hacer nada, todo el mundo con las hormonas revolucionadas. Un poco reflexivos, aún continuamos analizándonos con esto de los números. Ahora hay un tema nuevo: me voy. Algunos me han dicho que se les hará raro, q se me echará a faltar, algunos supongo que pasan y otros aún no lo saben. Aún estaría a tiempo de echar marcha atrás: no se lo he dicho a mi jefe todavía. Pero no, voy en busca de tiempos mejores, de nuevas ilusiones.

"¿Qué decía la bola de cristal cuando echó a rodar?"

miércoles, abril 19, 2006

Resolución del test

Ya sé que número soy en el Eneagrama de Gestalt: el siete, mi número favorito. El Epicúreo. El 7 es de los números mentales, pero el que menos. Todavía no sé qué subtipo soy pero puedo tender hacia el 1, el Perfeccionista, y hacia el 8, el Jefe que es el más visceral, aunque no he leído mucho sobre estos dos porque me han dicho que soy MUY SIETE.

Me he estado enterando un poquillo y qué razón tienen. Es muuuy largo pero he copiado algunos extractos. Sólo necesito saber cómo colgarlos como archivo, porque paso de poner el tostón como post y así lo irá a leer sólo quién le interese. Se admiten indicaciones sobre como colgarlo...

miércoles, abril 12, 2006

En blanco

Ya sólo sabe escribri sobre ella misma, qué ingrata. Quizá si tuviese a quién susurrar sus sueños o hacer reir con sus risas, sería diferente y vendría la inspiración.

Ilusiones

Me han dicho que vaya a hacer el Camino de Santiago sola, que andando se piensa mucho... No me hace falta, pero me lo estoy planteando seriamente.

martes, abril 11, 2006

Entrevista con la vampira

Últimamente llevo varios procesos de selección y me he tenido que chupar un montón de entrevistas de trabajo. Hay cosas que me gustan o que con el tiempo he ido apreciando, pero en general me hartan.

Me gusta ver cómo se comporta la gente, qué es lo que te cuentan y cómo mienten a veces. Todo lo que les pregunto me lo explican encantados. A veces sólo les dejo hablar porque no me ha dado tiempo a mirarme mucho su currículum, o simplemente lo voy hojeando mientras hablan. Prefiero mirarles a la cara, pero el pasar las hojas me tranquiliza. Entrevistando he aprendido a no sentirme obligada a llenar los silencios: tú marcas los tiempos y ellos esperan. No te examinan a ti, tú eres la entrevistadora. Antes me ponía nerviosa, me daba la sensación de que me estaban analizando, que ellos eran los que me iban a dar el aprobado o suspendido, qué iban a decir “qué mierda de entrevista” Jajaja. Ahora me lo creo un ratito.

Yo hago las entrevistas en castellano, por supuesto, porque me expreso mejor. Cuando alguien me responde en catalán varias veces me siento un poco incómoda porque el catalán es la lengua de la administración y en el trabajo debería hablar todo en catalán. Pero me da igual: yo soy la entrevistadora, y de siempre el entrevistado es el que tendría que cambiar a la lengua del que lo va a contratar. A mi me la trae, apuesto por el bilingüísmo porque si nos entendemos que cada uno hable en el idioma que se le de mejor. Por eso hoy no me ha dado la gana cambiar de idioma y hemos estado media hora hablando en catalán y en castellano. Mi jefe estaba en el despacho de al lado, no sé si estaría al tanto…

Luego hay otras cosas que odio. Resulta que tú haces tu pedazo selección, y llega y ves una tía que va genial para un puesto. Pero quieren tener tres personas para elegir, y te falta alguna, así que tienes que andar buscando a alguien de relleno, que también te gusta, pero sabes que no cogerán a esa persona, sino a la otra.

“Yo soy educadora social, no estudié para hacer entrevistas” pienso. Pero joder, entonces tampoco soy pedagoga, ni psicóloga, ni relaciones públicas, ni administrativa, ni todas esas cosas que nos toca ser en un momento dado porque es parte de nuestro trabajo. O sí… Porque la Educación Social tiene un poco de todo.

Así que a diario estoy aguantando a algún listillo o listilla que quiere ir de sabelotodo, o meterme mil bolas, o a aquella persona que está asqueada del trabajo de educador y me lo cuenta en la entrevista (¡qué fuerte!), o a aquella otra que ha ido esta misma mañana a mil entrevistas de mil cosas diferentes (¡¡y también me lo cuenta!!), y un largo etcétera de personajes…

En fin, que pena damos todos cuando buscamos trabajo y qué poco se puede demostrar lo que valemos en media hora…

lunes, abril 10, 2006

Para que tú me oigas

Para que tú me oigas,
mis palabras
se adelgazan a veces
como las huellas de las gaviotas en las playas.

Collar, cascabel ebrio
para tus manos suaves como las uvas.

Y las miro lejanas mis palabras.
Más que mías son tuyas.
Van trepando en mi viejo dolor como las yedras.

Ellas trepan así por las paredes húmedas.
Eres tú la culpable de este juego sangriento.

Ellas están huyendo de mi guarida oscura.
Todo lo llenas tú, todo lo llenas.

Antes que tú poblaron la soledad que ocupas,
y están acostumbradas más que tú a mi tristeza.

Ahora quiero que digan lo que quiero decirte
para que tú me oigas como quiero que me oigas.

El viento de la angustia aún las suele arrastrar.
Huracanes de sueños aún a veces las tumban.

Escuchas otras voces en mi voz dolorida.
Llanto de viejas bocas, sangre de viejos súplicas.
Ámame, compañera. No me abandones.
Sígueme. Sígueme, compañera, en esa ola de angustia.

Pero se van tiñendo con tu amor mis palabras.
Todo lo ocupas tú, todo lo ocupas.

Voy haciendo de todas un collar infinito
para tus blancas manos, suaves como las uvas.

(Poema V, de Pablo Neruda)

Abandonado Neruda...

viernes, abril 07, 2006

I feel good, tananananananan!

Hoy tengo cara de no haber dormido apenas, de haberme vestido rápido y en 10 minutos haber salido corriendo por la puerta sólo habiéndome lavado los dientes y habiéndome hecho una coleta. Llevo cara de haber salido anoche, no me he desmaquillado los ojos, el párpado inferior oscurecido por el rimel, la raya negra difuminada. Tengo cara de llevar unos cuantos días sin comer mucho y bastante rápido. Cansada de trabajar.
Y me siento bien, me siento orgullosa de mi misma, me da la sensación que tengo la sartén cogida por el mango. Puedo hacer todo lo que quiera si me lo propongo. Soy capaz de trabajar de 9 a 22h y después irme de fiesta hasta las 4 y media de la mañana. Puedo acabar todo lo que tenía que hacer en ambos trabajos. Tengo mi casa bastante recogida, el frigorífico lleno y dos pares de zapatos nuevos. Veo a algunos amigos, llamo a otros… Visito a mi familia, de hecho he ido a comer con mi madre durante esta semana. Habré adelgazado un poquillo, no sé cuánto porque no me he pesado, pero lo noto en la ropa. Y me siento bien por tener una buena oferta de trabajo, por mirar hacia atrás y ver que, con lo impulsiva que soy, estoy siendo cautelosa. De un tiempo a esta parte voy tomando las decisiones importantes en mi vida justo en el momento que toca, y salen bien por muy drásticas que sean porque no vuelvo sobre mis pasos. Sigo mi camino, mi trayectoria profesional, y pienso que tendré un futuro prometedor, que estoy haciendo (y por tanto haré) una buena carrera laboral.
Y en mi mundo personal me siento bien, tranquila… sin grandes pasiones ahora mismo, pero algo ilusionada con algunas cosillas y en general contenta. Y total, que queda mucha vida por vivir, que 23 no son nada... y reconoceré que no se me está dando mal por ahora.

jueves, abril 06, 2006

De leyendas va la historia...

Estoy haciendo en el trabajo la formación sobre interculturalidad, es decir, que la estoy creando para luego impartirla (que aquí una es autosuficiente y encima se quejarán y todo) La cosa es que estoy trabajando uno de los apartados que agrupa todo el tema de prejuicios, estereotipos, cómo se crean, cuáles son los más comunes, cómo trabajarlos, etc. y me he acordado de una pequeña anécdota.

Cuando estudiaba árabe (tenía tiempo y dinero... qué maravillosos años) le preguntamos a mi profesor en una de las clases si era verdad que en según qué países árabes si no eructabas después de comer era que no te había aprovechado la comida y, por supuesto, era de mala educación. Supongo que todos lo habréis oído alguna vez porque es un comentario que se extiende tal cual lo hizo el perro y la mermelada de Sorpresa, Sorpresa.

Hassán, que así se llamaba el profesor, alucinó y dijo que en ninguna parte que él conociese era de buena educación, que quizá en algún pueblo… algún viejito… pues la familia hace la vista gorda si eructa, pero vaya, que no. Es decir, como aquí, aunque menos porque aquí ahora eructar a algunas persones les descojona cuando están en plena edad del pavo o cuando saben decir su nombre y apellidos en un solo eructo (como mi hermana, aunque no es cosa de familia, eh?)

Lo bueno fue lo que añadió él. Dice que cuando vino a España venía un poco asustado. Allí la leyenda urbana sobre nosotros es que vamos tirándonos pedos por la calle (sobre lo que tampoco andaría muy equivocado con según quienes)

Bueno, he ahí las historias que nos inventamos…