Yo no quiero escribir sobre amor
Ya que he recordado en el post anterior el hecho de que no quisiese escribir sobre amor, aquí tenéis una cosa que escribí allá por el 2001 (creo recordar) sobre este tema:
No quiero escribir sobre amor. Tengo la cabeza llena de mil historias, de cuentos de hadas para niñas, de cuentos de príncipes para niños, de reivindicaciones que deberían ser leídas, de novelas de traición,... Quiero contar a quien me lea mis humildes imaginaciones que desean ser liberadas al papel uno de estos días, y para ello aparecen en mis sueños de madrugada, en mis apuntes de clase, en mis viajes en metro,... “Lo siento” les digo, “es imposible”. Es imposible porque cuando me siento frente al papel sólo pienso en escribirle a Él, y comienzo a explicar al mundo entero cuánto le quiero. No estaría tan mal si no fuese porque estan agotadas mis palabras y su amor no merece la superficialidad de mis versos. Deseo dedicarle algo tan sentido que, como otras veces me ha sucedido, llore a la vez que escriba. Pero no puedo porque mi mente está en las historias que se encierran y que no quieren salir, y la poesía que estaba en mi alma , ya cansada, se fue a dormir. Yo quiero escribir sobre otras cosas, pero le amo y le extraño tanto que no puedo olvidarme de él. Es una persona tan especial que es imposible apartarlo de mi pensamiento. Estoy tan agradecida de tenerlo que mis letras se sienten en deuda con él. Y ya veis, haga lo que haga, siempre acabo hablando de amor...
No quiero escribir sobre amor. Tengo la cabeza llena de mil historias, de cuentos de hadas para niñas, de cuentos de príncipes para niños, de reivindicaciones que deberían ser leídas, de novelas de traición,... Quiero contar a quien me lea mis humildes imaginaciones que desean ser liberadas al papel uno de estos días, y para ello aparecen en mis sueños de madrugada, en mis apuntes de clase, en mis viajes en metro,... “Lo siento” les digo, “es imposible”. Es imposible porque cuando me siento frente al papel sólo pienso en escribirle a Él, y comienzo a explicar al mundo entero cuánto le quiero. No estaría tan mal si no fuese porque estan agotadas mis palabras y su amor no merece la superficialidad de mis versos. Deseo dedicarle algo tan sentido que, como otras veces me ha sucedido, llore a la vez que escriba. Pero no puedo porque mi mente está en las historias que se encierran y que no quieren salir, y la poesía que estaba en mi alma , ya cansada, se fue a dormir. Yo quiero escribir sobre otras cosas, pero le amo y le extraño tanto que no puedo olvidarme de él. Es una persona tan especial que es imposible apartarlo de mi pensamiento. Estoy tan agradecida de tenerlo que mis letras se sienten en deuda con él. Y ya veis, haga lo que haga, siempre acabo hablando de amor...
2 Comments:
Ya lo habia leido hace tiempo, si mal no recuerdo. Siempre acabamos hablando de lo mismo unos y otros. Somos cansinos. Besos :*
By Anónimo, at 8:41 a. m.
ya he leído historias sobre las que se escriben otras, no puedes ni se puede escribir algo que está presente pero se ignora, el amor en sí es algo que hasta los superhèroes de cómic no logran decifrar a cabalidad, lo que realmente se rememora es el sinsabor de boca que nos deja todo lo que no nos complace, no es un simple desdecir, es decirlo de una forma que justifica lo que no podemos encontrar con la gente que amo (o se ama). lo que se busca es el amor que sin color, sabor y olor se lo siente pero no se lo conoce...
By Anónimo, at 8:20 p. m.
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