Libros, sueños, el mundo y yo

No sé si por casualidad o por qué, en los últimos tiempos han ido a parar algunos libros a mis manos. Quizá alguno en cierto modo lo he buscado, pero el último estoy segura que ha llegado para sorprenderme. ¿Qué fue antes? ¿El huevo o la gallina? Eso es lo que no sé, si llegarón a mi xq mi cabeza ya daba tumbos por ahí sola o han sido estos libros los que han desmontado a Diana.

Lo cierto es que llevo una temporada haciendo el análisis más egocentrista que os podáis imaginar. Llevo un tiempo estudiándome, a mi que cambio día sí y día también, y aprendiendo de mis errores. Estoy aprendiendo a decir "no", a decir "esto no me gusta", o "no me sienta bien". Aprendiendo a sentir que hay gente que no importa lo que piense. Me da la sensación que con una mayoría de gente con la que me relaciono en mi vida personal aplico un patrón de conducta... no sé, muy comercial, muy laboral... Y me muerdo la lengua cuando necesitaría expresar sentimientos, sensaciones, emociones... Emociones que además no sé controlar friamente porque me cuesta darme cuenta de quién puedo esperar algo y de quién no, de quienes son mis amigos y quienes conocidos, etc.

A esto se suma Jodorowsky con su Danza de la Realidad haciendome analizar cada día mis sueños y pesadillas, buscando el sentido a mi vida, buscando la raíz de mis males, mis problemas, estudiando a mi familia.

Se presenta Eduardo Galeano seguidamente con su Libro de los Abrazos con sus tantas historias de injusticia social y me siento culpable porque... ¿dónde se ha quedado mi granito de arena? Yo soy educadora social por una idea (tan idealista como siempre) que es cambiar un poquito este mundo que me encanta y que, paradójicamente, tiene muchas cosas que no me gustan. Lo sé, tengo que ponerme a hacer algo, podría volver a dar clases de castellano alguna hora por la mañana... Y también sé que me debería organizar mejor.

Hace una semana aproximadamente Muchas Vidas, Muchos Maestros salió de la estanteria de casa de mi hermana para ir a parar a mis manos, pensando que hablaría de experiencias educativas, ya que mi hermana también está metida en el ajo. Pero no, este libro ha contribuido a mi comedura de olla con todo el tema espiritual: las reencarnaciones, familias de almas, aprendizaje de cada vida, etc. Un psiquiatra escribe su experiencia con una paciente que mediante la hipnosis regresa a sus vidas anteriores.

Bueno, llevo un cacao mental que ni en plena efervescencia adolescente. Me prometo que el siguiente libro será de esos de no pensar demasiado. ¿Alguna sugerencia?

En fin oye, ahora que me releo me doy cuenta de como nos complicamos la existencia...